La moderna lauderia
La moderna construcción de instrumentos de cuerda
Es un viejo tema de controversia el de saber si existe o no una superioridad de la violería clásica (italiana y cremonesa en particular) sobre la violería moderna; bastará pensar en Jean-Baptiste Vuillaume, en su fascinación por los italianos y en sus innumerables copias. El elemento mítico, simbólico y legendario es indiscutible en la atracción por la violería antigua, y es cierto que muchos violinistas tocan con instrumentos italianos que a veces son más caros y menos bellos que algunos franceses del siglo XIX o incluso de los modernos, únicamente porque creen aproximarse así a la leyenda, al mito y por esto mismo a los grandes violinistas a quienes admiran. Sin embargo, reconozcamos que nada iguala a un bello Stradivarius o a un bello Guarnerius y que en el momento actual ningún instrumento moderno puede compararse sinceramente con ventaja a ellos; más allá del esnobismo, tocar con un Stradivarius es una experiencia inolvidable. ¿A caso no confesaba Kreisler que reservaba su Vuillaume, que, no obstante, tenía en gran estima, para los países tropicales, y que sólo tocaba con su Stradivarius? Y Paganini mismo, que poseía, sin embargo, la soberbia copia de Vuillaume hecha a partir de su Garnerius (expuestos ambos en el Ayuntamiento de Génova), ¿no tocaba preferentemente su Guarnerius?
En realidad, no es ilícito pensar que algunas técnicas tradicionales, que desde hace tiempo se intentan recuperar y comprender, se han perdido; no sería el único ejemplo en la historia de la artesanía, en que, como consecuencia de múltiples convergencias, un arte ha alcanzado su cima en cierta época. Pero, en el plano práctico, nada impide que un violero haga un día algo tan bello como un Stradivarius. La pátina del tiempo, argumento con excesiva frecuencia aducido, parece ser menos determinante de lo que suele afirmarse. La violería no está muerta, y gran número de violeros hacen violines muy interesantes que a menudo suenan tan bien como algunos violines italianos.