Violinistas: Silvestre Revueltas

Revueltas es considerado como uno de los máximos representantes de la corriente nacionalista, que buscaba la renovación de las formas, recuperando los valores de la música indígena y el pasado prehispánico.

Silvestre Revueltas Sánchez nació en Santiago Papasquiaro, Durango el 31 de Diciembre de 1899 y murió el 5 de Octubre de 1940 en la Ciudad de México; fue violinista, compositor y director de orquesta.

Procedente de una familia culta y dedicada a las artes, su hermano Fermín fue un pintor muralista, José fue escritor y guionista, su hermana Consuelo pintora y Rosaura actriz.

Desde temprana edad Silvestre Revueltas desarrollo un gusto por la música, gusto que venía desde los anhelos de su madre, comenta el compositor: “Mi madre soñaba con tener algún día un hijo artista, poeta, escritor, músico, alguien que pudiera expresar todo lo que ella admiraba y amaba de la naturaleza y de la vida.”

Pero su padre fue quien a la edad de siete años le regaló su primer violín. Sus primeras lecciones fueron en su ciudad natal por un profesor llamado Francisco Ramírez del cual no se tiene más información.

Para 1911 cuando contaba con doce años de edad, la familia se trasladó a Durango con el fin de abrir un negocio, Silvestre continuó sus estudios de violín en el Instituto Juárez y en 1913 sus padres deciden enviarlo a la capital del país donde es recibido por un amigo de la familia para estudiar en el Conservatorio Nacional. Sus padres fueron clave fundamental para el desarrollo de sus habilidades artísticas tanto de él como de sus hermanos ya que como menciona Eduardo Contreras: “gracias a su amplia cultura, intuyeron el talento de los niños y se esforzaron por apoyarlos y promover su educación”.

Estudio 4 años en el Conservatorio teniendo como profesores a José Rocabruna con quien estudió violín y Rafael Julio Tello con quien estudió los inicios de composición.

Para 1917 se fue con su hermano Fermín a estudiar a los Estados Unidos en el Edward’s College de Austín Texas, posiblemente a decisión de su padre para alejarlo del ambiente turbulento que se vivía en el país por la Revolución.

Con algunas carencias continúo sus estudios y dió recitales, así lo manifiesta en una carta a sus padres: “Mis queridos papás, el domingo 16 de septiembre de 1917, fui a tocar en el hospital del colegio; no sé si esto ya se los he dicho, pero ha sido uno de mis mejores días, o mejor dicho ha sido el único, estuve muy contento; era un bello público el de esa noche, solo muchachas enfermeras y quedaron muy complacidas”.

Para ese entonces Revueltas se desarrollaba en un ambiente de estilo principalmente romanticista de finales del siglo XIX, estilo que denota un virtuosismo de los ejecutantes y una “paz musical” perceptible en las diversas piezas a estudiar. Pero aún con todo esto Revueltas conoció a una de sus grandes influencias musicales Claude Debussy. Este músico francés perturbó los oídos de Silvestre con su particular música, halló en él un estilo que se parecía a lo que el joven compositor quería expresar. Cuando uno escucha la música de Debussy, el uso de las disonancias y los acordes tensos parece ser un común denominador también presente en las composiciones de Revueltas.

Después es promovido para ingresar al Chicago Musical College en Illinois. Institución fundada en 1867 como Chicago Academy of Music; después se incorporó a la Roosvelt University.

Su maestro de violín fue León Sametini. De esta época hay una composición de Revueltas para piano y violín llamada Cuiden su vida”. Silvestre se gradúa en armonía, violín y composición en 1919.

Después en 1922, toma clases con los profesores Kochanski y Otakar Sevcik.

Silvestre comenzó a trabajar en las salas cinematográficas de la época en cuartetos y orquestas que musicalizaban las películas mudas.

Pero regresa a México tras la muerte de su padre en 1923 y comienza a trabajar con el Cuarteto Clásico Nacional con Francisco Agea, dando recitales. Pero un acontecimiento importante es que conoce a Carlos Chávez.

Sin embargo Silvestre regresa a Estados Unidos en 1926 para probar suerte dirigiendo pequeñas Orquestas de Teatros entre otros espectáculos.

Al terminar las temporadas de trabajo, cayó en un pesimismo provocado por su desempleo, su ambigua situación económica y un asalto que le dejaría el rostro marcado para siempre. Hasta que en 1928 recibe una carta de su amigo Carlos Chávez quien ya era director del Conservatorio Nacional de Música, y quien lo invitaba a dirigir una Orquesta de alumnos y unos conciertos de la OSM. (Orquesta Sinfónica de México).

Revueltas tuvo un calendario muy atareado dentro de la orquesta, dirigiendo e impartiendo clases de música. Para esta última década de vida del compositor contrajo matrimonio con Ángela Acevedo, con quien tuvo tres hijas Eugenia, Natalia y Alejandra Revueltas Acevedo.

Para 1931 comienza su mayor producción musical, componiendo las obras que hoy conocemos. Tuvo un distanciamiento para siempre con Chávez y desconocemos las causas de esa ruptura.

Después se fue a España, donde participa en cuestiones políticas a favor de la República durante la guerra civil y compone música para filmes de cine: como la película Redes y Vámonos con Pancho Villa en 1936, donde también debutó como actor haciendo el papel de un pianista de cantina tocando la cucaracha. Y produjo para diciembre una de sus composiciones más famosas Homenaje a Federico García Lorca, que se estrenó para el 14 de Noviembre en el Palacio de Bellas Artes.

Lamentablemente la vida de un genio es incomprendida y llena de turbaciones, la última década de su vida fue muy profusa en cuanto a trabajo, pero también tuvo su parte negativa, lo abordo una terrible crisis emocional que lo llevo al alcoholismo y en 1939 al hospital, allí escribió un diario donde manifiesta su desencanto por la vida. “El gesto más cruel es conservar a un enfermo por meses y años con la remota esperanza de curarlo, más amoroso seria matarlo, pero la crueldad innata del hombre lo conduce a prolongar sus agonías. No solo con el hombre sino hasta con los animales, ¡Pobre humanidad! Y ¡Pobres hombres!

La vida del compositor fue interrumpida la noche del 4 de octubre de 1940 como resultado del alcoholismo y una mala salud que derivaron en un cuadro de neumonía. Sus restos fueron trasladados en 1976 a la Rotonda de los Hombres Ilustres del Panteón Civil de Dolores en la Ciudad de México.